lunes, 2 de noviembre de 2009

LA ILUMINACIÓN Y EL AHORA

La iluminación y el ahora
Desarrollo del equilibrio de Dios.

Según el texto el ahora, sabemos que es la situación en nuestra
conciencia en la que estamos situados y establecemos nuestro
equilibrio escalonada mente a través de la meditación, tai shi,
Qi gong, Yoga, Reiki y todos los sistemas dispuestos para este
ojetivo. Cuando vamos equilibrando o iluminando el ahora que somos,
es decir nos situamos en nuestra conciencia en unión con todo lo que
nos rodea, Dios, Universo Eterno (humanidad, planeta tierra y
universo) y a través de esa unión nos conocemos plenamente y
conocemos el objetivo que cumplimos en todo lo que somos. El ahora
es desde que estamos en el vientre materno hasta el momento que
somos conscientes de todo cuanto nos rodea a través de todos nuestros
sentidos, y lo nombramos como ahora o momento presente.
Es en ese momento cuando la iluminación o equilibrio se produce en
nuestra conciencia es cuando cumple su objetivo en todo nuestro ahora
o en todos nuestros niveles de consciencia, y es en cada experiencia que
forma parte del ahora que somos donde tiene que reflejarse el equilibrio
o iluminación del momento en el que nos encontramos Ahora, es decir
tenemos que comprender toda nuestra vida según nuestro nuevo
equilibrio que va aumentando constantemente, a través de la
meditación y el servicio a Dios en la vida que somos.
Pero el ahora también es el momento presente que seguimos
expandiendo, es decir desde el ahora o momento presente a través de la
meditación y las afirmaciones establecemos nuestra situación constante
desde la unidad de nuestro ser o conciencia (unión plena a Dios).
Sabemos que las afirmaciones además de hacerlas en la meditación
también podemos realizarlas en cualquier momento del ahora del día que
vivimos para iluminar, y lo que hacemos hacia lo que iluminamos es hacer
que su ciclo de luz se abra más a la luz Divina o a su unión a Dios. Por eso
lo que llamamos opinión es una afirmación que esta en un determinado
nivel de equilibrio o luz hacia todo lo que somos, y su equilibrio es
progresivo en todo nuestro ser.
En la iluminación todo es lo que es, o lo que es lo mismo, todo es lo que
somos observándonos en nuestros diferentes niveles de equilibrio,
también podemos entenderlo como que lo que observamos es luz de
nuestra luz o luz de Dios que brilla de una forma determinada
dependiendo de su equilibrio y que se esta iluminando o equilibrando
constantemente en unión plena a nosotros, o unión a Dios.

Cuando vamos iluminándonos, completándonos, liberándonos y estamos
ascendiendo en nuestro interior, puede ocurrir que lo hagamos en
desequilibrio, es decir que en vez de hacerlo de manera escalonada, lo
hacemos en pocas veces, cuando esto sucede, no nos estamos
iluminando como determina Dios, y estamos contemplando solo una
parte de nosotros, (queremos llegar muy pronto), y todo tiene su proceso.

Es entonces cuando, dejamos en el ahora que somos, zonas de nuestra
luz que no brillan al mismo nivel que todos nuestros niveles y tenemos
que situarnos en esos puntos para Iluminarlos y hacer que toda nuestra
luz que forma nuestro ahora brille al mismo nivel, lo que ha ocurrido es
que hay experiencias que están en nosotros que brillan muy poco y las
consideramos negativas, y en el ahora seguimos afirmándolas o
contemplándolas de la misma manera, aunque no lo vemos porque no
queremos verlo y por eso quedan pendientes en nosotros. Lo que
tenemos que hacer es a la vez que nos iluminamos, equilibramos, y
ascendemos, a través de la meditación, llegamos a esos momentos nos
introducimos en ellos diciendo (Yo Luz Divina, desde el ahora accedo a
este momento de mi Ser para iluminarlo gracias a Dios), entonces
recordamos ese momento completo, y nos situamos en el comienzo y
con el equilibrio o iluminación que tenemos en el ahora lo reconocemos
de nuevo, es decir lo piensas y lo valoras según tu equilibrio, haciendo
que forme parte del ahora en completo equilibrio.
A partir de ese momento todo tu ser esta en armonía y equilibrio en el
ahora y sigues tu crecimiento desde ese punto de ti mismo en paz
interior.Ya toda tu luz brilla igual y desde el ahora sigues ascendiendo
a través de la meditación y el servicio de la vida diaria que eres,
habiéndote encontrado a ti mismo.